YO NO FUI, FUE TETÉ

Sublime intervención la del capataz de la CNBS, Marcio Sierra, que dio patada y mordida cuando adelantó discretamente que este año también nos volveremos a ir chucos sin poder acceder a los fondos de la Cuenta del Milenio, una desgracia de la que dijo no tener ninguna culpa, ya que toda es de la ASJ. Oiga bien.

El descarado regate del funcionario se sustenta, según la realidad alternativa en la que parece vivir, en el hecho de que para que los gringos aflojen el billete, antes toca aprobar una encuentra de percepción de la corrupción, en cuya última edición la ASJ aplazó revés y derecho al gobierno refundidor, y no por placer sino porque no hay manera de apañar tanto cagadal del actual gobierno.

Y es que para aprobar la vaina esa se ocupa salir avante en más de la mitad de los 20 indicadores evaluados para tal fin, y es ahí donde la refundación cojea más fuerte, porque en lo que respecta a la corrupción sus números rivalizan y hasta superan, por increíble que parezca, a los de sus predecesores azulejos a los que tanta tierra le echan.

Pero Marcio es un tipo fiel a sus patrones, y eso lo obliga algunas veces a hablar quizás hasta en contra de su voluntad, porque según él, la ASJ hace su encuesta “a los mismos actores con las mismas preguntas”, y así se pone la cosa como en chino, porque “todos ellos formaron parte de los beneficios que recibían de la narcodictadura”. Excusas que al empresario Eduardo Facussé le recordaron aquello de “Yo no fui, fue Teté, pégale pégale que ella fue”, según puso en X.