¡VIENE ELVER! Y LA VULNERABILIDAD DE LA CAPIRUCHA FLORECE

 

¡Atención vecinos del Distrito Central! No es por alarmar, pero los expertos dicen que los próximos días viene un reverendo porrazo de lluvias que podría causar muchas travesuras en la capirucha, que es muy susceptible al agua.

Para muestra un botón con las últimas tormentas que han caído se han visto cagadales por todas las calles, los pobres vecinos del Reparto ya tienen sus casas rajadas y los de La Colonia Guillen ni que decir porque duermen parados por el terror a que les caigan las paredes encima, o simplemente se desplomen como la iglesia católica, el monumento a la fe quedó en escombros.

Las quebradas de El Sapo y La Orejona están a punto de convertirse en las nuevas atracciones acuáticas de la ciudad. Las lluvias de este viernes han transformado las calles en auténticos ríos urbanos, dejando vehículos a la deriva y a motociclistas protagonizando escenas dignas de una película de acción.

Otros ejemplos han sido visibles para el caso en el sector de El Hogar, donde las calles se convirtieron en piscinas improvisadas, perfectas para aquellos que siempre quisieron un poco de aventura sin salir de la ciudad. Las redes sociales se han inundado, literalmente, de videos y fotos mostrando cómo las corrientes arrastraron coches y motos como si fueran juguetes. ¡Ni los parques acuáticos ofrecen tanta emoción!

En la colonia Alameda, los automovilistas vivieron su propio rafting urbano cuando las potentes corrientes cubrieron sus vehículos. Un motociclista estuvo a punto de convertirse en el protagonista del próximo meme viral, al casi ser arrastrado por las aguas.

El Bulevar Centroamérica no se quedó atrás, con un carril inundado que dejó a una motocicleta flotando río abajo. Cerca del Mall Multiplaza, las calles se transformaron en rápidos, gracias al colapso de los tragantes que decidieron tomarse el día libre.

Como era de esperar, el área alrededor del Hospital Escuela no defraudó. Fiel a su reputación, se inundó nuevamente, brindando a los habitantes un déjà vu acuático. En la colonia El Prado, las calles se convirtieron en charcos profundos, deteniendo el tráfico.

Así que todos los que viven en zonas vulnerables en las ciudades gemelas, Tegucigalpa y Comayagüela, que son la mayoría a dormir con un ojo abierto y otro cerrado, no vaya a ser que lo arrastre la corriente. Talvez esto va sirviendo de lección para que las autoridades hagan verdaderas obras de mitigación y la población aprenda a poner la basura en su lugar, para no obstruir cunetas y tragantes.

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