VERGÜENZA AJENA
Las propuestas de campaña pasaron a mejor vida en el sur, donde el circo se ha apoderado por completo de la escena política local, con un diputado Mauricio Rivera que a falta de ideas y amor propio le dio por echarse un caitazo en pleno salón legislativo, exigiendo así la salida de Quintín Soriano de la silla municipal en Choluteca.
La triste escena del parlamentario refundidor llega en medio de la guerra abierta que mantiene con el edil, a quien incluso mandó echarle sus colectivos para cerrarle el edificio municipal, bajo señalamientos de supuesta corrupción e incumplimiento de promesas.
Para ello, al bailecito de la vergüenza Mauricio decidió acompañarlo del hashtag #FUERAQUINTINCHALLENGE, con el que pretende sumar valientes dispuestos a apuntarse a semejante ridículo; aunque habiendo pasado ya dos días desde el lanzamiento de la “iniciativa”, ni siquiera los refundidores más impúdicos han dado señales de vida.
Aunque más allá de sus estupideces, tampoco hay dejar pasar el hecho de que tanto él como muchos otros de los suyos han convertido la sala del hemiciclo en una especie de prostíbulo, cuando debería ser espacio para el debate y las propuestas que parecen no tener.