TIENEN AL PAÍS PATAS ARRIBA

La caja de pandora que se abrió con el narcovideo de Carlón, grabado en 2013 y revelado en días recientes, tiene al gobierno refundidor al borde del abismo, con más de medio país exigiendo al unísono la renuncia de la presidenta y su parasitario familión, quienes en respuesta ordenaron a la totalidad del organigrama estatal cerrar filas en torno a ellos, sin rechistar, si es que no quieren quedarse sin chambitas ni privilegios.

Tal es el caso de Rixi Ramona, que actuando según ella como ministra y no como precandidata, se plantó en las horas posteriores en el “oligarca” foro Frente a Frente. Ahí intentó hacer creer que Libre ya está en plena catarsis a raíz del macaneo, y que el clavo en todo caso es solo de Carlón, que actuó por cuenta propia y no en nombre del partido, fingiendo ella desvincularse de él, cuando lo cierto es que lo mantienen con bajo perfil en las filas del M28.

Un argumento intragable y absurdo a partes iguales, adoptado en modo automático por todos y cada uno de los vasallos de la refundación, incluida la mismísima presidenta Xiomara Castro, que en un fallido intento de regate salió en plena cadena nacional de radio y televisión no a reconocer sus metidas de pata, sino a recordar las metidas de pata de una una larga lista de personajes de la oposición a los que nombró uno a uno, como si la cosa se tratara de establecer quiénes son más narcos, si ellos o los otros.

Una larga lista en la que, por supuesto, no incluyó ella el nombre de su cuñado ni tampoco el de su marido Mel, a quien se nombró con preocupante frecuencia en el narcovideo, y no por los narcos sino por el propio Carlón, al que no le quedó más remedio que renunciar a sus cargos en el Legislativo, lo que valió para que algunos en su partido empezaran a catalogarlo como “héroe” y “valiente”, como para dejar constancia del nivel de imbecilidad que son capaces de cargar.

Explicó además la mandataria en la bochornosa cadena nacional que nada de eso estaría pasado si no fuese porque un pajarito les contó que las fuerzas oscuras les andan queriendo repetir la dosis del golpe de Estado del 2009; y que para evitar males mayores lo más sensato fue actuar en consecuencia y denunciar el tratado de extradición con los gringos, convenientemente cuando empezó a rondar el rumor de un posible llamado desde el norte a algunos de sus parientes cercanos.

Pero su cinismo, lejos de calmar a la gente mas bien la encachimbó, provocando la casi inmediata convocatoria de una marcha de la indignación que acabó siendo multitudinaria y que sirvió para que miles de desencantados desempolvaron sus antorchas y se echaran a las calles de la capirucha a exigir la salida de toda la parentela castrozelayista, a la que consideran la causante de la crisis.

Una marcha que sin duda establece un paralelismo claro y perturbador con lo que le tocó vivir al predecesor gobierno del indómito, y por narcosituaciones muy similares, con la diferencia de que a Juan Orlando tardó una decena de años en salpicarle, y a los refundidores apenas les bastó dos y medio, con el karma pasándoles factura por haber vendido la piel del oso antes de cazarlo.

Y es así como se pasó en un santiamén del “¡Fuera JOH!” al “¡Fuera familión!”, que se grita ya a todo pulmón en los estadios y otros espacios públicos donde la censura y los contraataques y banalizaciones con los que ha respondido el oficialismo no surten ningún efecto, pues se trata de la voz del soberano recordándoles quién es el que de verdad manda.