TIEMBLAN LAS REMESAS Y EL TPS

Desde las tierras del mismísimo imperio, Juan Flores, mentor de la comunidad migrante catracha, hizo ver al gobierno refundidor la metedura de pata en que podrían incurrir si finalmente les da por echar a los gringos de la base militar en Palmerola, ya que si cumplen esa amenaza significaría poner a caminar por el filo de una navaja a las remesas que envían desde allá los compatriotas y el TPS con que muchos de ellos justifican legalmente su residencia.

Con esa crudeza criticó el hombre el nuevo berrinche del gobierno de la refundición, oficializado por boca de la mismísima comandanta Xiomara Castro en cadena nacional, calificándolo él como parte de una “agenda ideológica” que lo único que busca es desviar la atención de los problemas reales del país, que sin duda se han acrecentado desde que agarraron ellos la guayaba.

Considera Juan que la postura de la mandataria es “delicada”, a tenor de la respuesta que podría recibir por parte de su próximo homólogo, el chepe Trump, al que prácticamente puso una oferta de chantaje sobre la mesa, pues justificó su amenaza con la amenaza previa del magnate, quien planea deportar a miles de catrachos y de otras nacionalidades cuando asuma al cargo.

“Imaginen qué difícil sería para nuestra economía si el presidente Donald Trump decide imponer un arancel a las remesas. La presidenta Castro está poniendo en riesgo los ingresos de millones de familias hondureñas”, además de las negociaciones en curso para la ampliación del TPS, criticó Flores.

Finalmente, recordó también el presidente de la Fundación 15 de septiembre que “cada vez que la presidenta Castro actúa en contra del gobierno de los Estados Unidos, actúa en contra de millones de hondureños”, pues ya se sabe que cuando los gringos estornudan, a los catrachos nos da neumonía.

Share via
Copy link