SIN LA CICIH AL FISCAL NADIE LE CREE
En el país de Alicia donde la política es un espectáculo más entretenido que cualquier telenovela, el sacerdote Ismael Moreno, le ha lanzado tremendo riflazo al fiscal Johel Zelaya, a quien le ha dado por andar dándose baños de masas, el Jesuita le dijo que traigan primero la Comisión Internacional contra la Impunidad en Honduras (CICIH), porque la gente al Ministerio Público no le cree ni el bendito.
La CICIH, es el nuevo superhéroe que necesita el Ministerio Público para ser tomado en serio. Si quieren “credibilidad” nada mejor que la intervención de un ente internacional para hacer el trabajo que, aparentemente, nuestros queridos fiscales no pueden hacer solos.
El padre Moreno, conocido por sus discursos siempre a punto de convertirse en sermones, afirmó que, si la CICIH estuviera presente, las acciones del Ministerio Público no solo tendrían respaldo, sino que hasta podrían ser vistas como algo más que meras actuaciones teatrales ante la sociedad hondureña.
Sí, así es, según él, la CICIH es el ingrediente secreto que transformará la justicia hondureña de un caldo insípido a una sopa gourmet.
Esto viene a colación porque el fiscal Johel Zelaya, que recientemente decidió que era hora de desempolvar algunos archivos y enviar citaciones y requerimientos contra figuras políticas, parece que no logró impresionar a Moreno.
No, no, para el padre Moreno, el Ministerio Público sin la CICIH es como un café sin azúcar: amargo y difícil de tragar. Según él, ante la avalancha de poderes que saben cómo sacar provecho de cualquier situación, el pobre Ministerio Público parece más bien un niño tratando de jugar en una liga de adultos.
Y es que, en un país donde la CICIH fue una promesa de campaña más brillante que cualquier estrella fugaz, ahora con razón todo mundo le reclama a la Xiomi que cumpla su palabra que al parecer vale menos que un cacahuate, otros ya se han resignado a que la transparencia y la lucha contra la corrupción son solo ilusiones tan efímeras como una promesa electoral.
Así que, según Moreno, sin la CICIH, el Ministerio Público está destinado a ser como un actor de reparto en la película de la justicia hondureña: presente, pero sin mucha relevancia en la trama principal.