SIGUEN SOÑANDO CON LA CICIH

Todos sueñan con ella, pero se está haciendo de rogar. En las últimas semanas el tema de la instalación de la Comisión Internacional contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH) ha cobrado fuerza en el debate público. Sin embargo, todavía no hay luz verde para su llegada al país como lo prometió la presidenta Xiomara Castro.

Diferentes sectores políticos y sociales han expresado su opinión sobre la CICIH, cada uno a su conveniencia. Como si fuera un vestido que debe tallarles bien. Por lo anterior, el Centro de Estudios para la Democracia (Cespad) publicó un documento que recalca las condiciones necesarias para establecer con éxito la Comisión Internacional contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras.

En el documento, el Cespad, identificó tres condiciones primordiales: el cumplimiento del Memorándum de Entendimiento, la derogación de los ‘pactos de impunidad’ y la imperativa voluntad política tanto del Poder Ejecutivo como del Legislativo. Y este último es el principal obstáculo, porque no hay voluntad política o porque no le conviene a los intereses del gobierno de Libre.

Para el Cespad, la participación activa de la sociedad civil en la CICIH, es primordial, considerándola un resultado directo de las exigencias y la indignación colectiva. Además, resalta la necesidad de que adopte un enfoque de derechos humanos y establezca claramente su salida del país, garantizando la protección de los operadores de justicia.

Al igual que otros sectores del país. el Centro de Estudios enfatizó en la importancia de otorgar a la CICIH la facultad de ser querellante adhesivo en procesos penales, una figura ya existente en la normativa nacional y la necesidad de aplicar medidas de restitución que beneficien a las comunidades y sectores afectados por la corrupción. Es decir, a todos aquellos que han resultado jodidos por la imperante corrupción en Honduras.

Share via
Copy link