SIGUE EL BLA, BLA, BLA CON LA CICIH

Con la tal CICIH el pueblo está entre que le dan atol con el dedo y la esperanza o la paciencia infinita.

La presidenta Xiomara Castro entregó a António Guterres, Secretario General de la ONU, un segundo borrador del tan esperado convenio para la instalación de la Comisión Internacional Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH).

Porque, claro, el primer borrador seguramente estaba demasiado verde. El canciller Enrique Reina, con toda la seriedad del mundo, nos recordó que el documento es tan confidencial que ni nosotros ni los corruptos más avezados podemos saber qué contiene.

El borrador incluye la emocionante incorporación de un “nuevo concepto jurídico”: el acusador privado , presentado por la diputada Xiomara Hortencia Zelaya, hija de la presidenta. Porque si algo le faltaba a la familia presidencial era inventar figuras jurídicas.

Según fuentes no tan confidenciales, el proyecto de ley está ya en su segundo debate.

Mientras tanto, la presidenta Castro le explicó a Guterres que su gobierno termina en 2026, por lo que insta a firmar el acuerdo ya mismo. Ojalá el sentido de urgencia llegue pronto a Honduras, donde la instalación de la CICIH parece ser una obra de teatro en capítulos interminables.

La diputada Fátima Mena, del Partido Salvador de Honduras (PSH), se atrevió a romper la burbuja de ilusión, recordándonos que llevamos casi tres años en esta espera. ¡Tres años!

Según Mena, lo que hay son cortinas de humo y un montón de reuniones para discutir… cómo hacer más borradores.

Así que, mientras el gobierno nos sigue dando atol con el dedo y Guterres sonríe amablemente desde Nueva York, los hondureños continuamos esperando. ¿Para cuándo la CICIH? Nadie lo sabe. Quizás llegue el día en que la firmemos, o quizás siga siendo esa estrella fugaz que aman los corruptos porque así nunca los atraparan.