SHOW CON MUCHAS INTERROGANTES EN EL CONGRESO

Al pobre dundo de René Adán Tomé, asesor de Luis Redondo, le tocó la lotería cuando los de la Atic lo sacaron enchachado como iguana del Congreso, adonde llegaron los agentes para secuestrar documentación “vinculada a casos de corrupción gestados en ese poder del Estado”, tal y como avisó más temprano en X Johel, el fiscal general.

Junto con Tomé también se fueron chucos dos crías más, ambos de la guardia personal de Redondo, que al ver que los agentes encapuchados le estaban dando jalón al asesor intentaron oponer resistencia, dando como resultado que se sumaran a la expedición rumbo al mamo, en las mismas circunstancias que René Adán, a quien acusan de obstrucción de la justicia.

Pero es muy probable que todo se trate de un show, para dar la impresión de que la Fiscalía actúa sin mirar colores, pues la detención de Tomé y los dos guaruras no da para más de una noche de cárcel y todo el espectáculo se fraguó, casualmente, mientras Redondo goza las mieles del poder con otro viajecito al exterior, esta vez en Marruecos.

Y desde allá reaccionó el mandadero, diciendo también en X que está “en la disposición” de colaborar, pues desde 2022 denunció la corrupción predominante en aquel entonces por diputados que “se confabularon para entregar el territorio, vender la Corte Suprema de Justicia, negociar los contratos del IHSS, los de energía, y trasladar a las ONGs fondos para la corrupción”.

Una reacción, sin embargo, que dio la impresión de ser premeditada, pues no son pocos los que creen que el show de la Atic solo tiene por objetivo poner cacahuetes y doblegar la voluntad de los diputados opositores, para que los oficialistas aprueben por fin su ansiada Ley Tributaria y otras más que no han podido por falta de acuerdos.

Dicho esto, ¿Qué llegó a buscar la Atic y a qué casos se refirió el fiscal cuando dijo que “los días de ocultar crímenes tras un escaño han terminado”? Solo Dios sabrá. Porque en casos tan complejos más vale ser cautos y no dejarse llevar por las especulaciones, que apuntan a que la documentación secuestrada por los agentes dizque tiene que ver con las subvenciones repartidas a la garduña por Redondo entre sus más cercanos.

“El pueblo exige respuestas y este Ministerio Público se encargará de dárselas” había escrito Johel, que independientemente de las razones de su sorpresiva decisión, lo cierto es que con ella no ha dejado indiferente a nadie y muchas son las preguntas que quedan en el aire, especialmente entre los opositores, que deben estar desorientados, como hormigas sin su migaja.