SE AVECINA EL TRANCAZO VEHICULAR

Ni siquiera el airecito del aguilucho pudo disfrutar a gusto la catrachada, cuando en la vuelta de la esquina ya se asomó el pago de la matrícula del carro, que obligará a muchos a darle prioridad para evitar tener que andar después con los ojos en la nuca evadiendo retenes.

El cobro, que se siente casi casi como el de una extorsión, comenzará el mero 1 de julio para las placas que acaben en 0 y 1, y así sucesivamente, de dos en dos, hasta llegar al 9 allá por noviembre, cuando la misma catrachada ande ya rezándole a todos los santos para que el calendario le meta nitro y les caiga el “catorceavo” que les permita volver a respirar.

Y la cosa se podrá más peluda para los de San Peter y la “capirucha”, donde el trancazo será de época, bajo la excusa de tener que seguir alimentando al monstruoso Siglo 21 y su réplica en la capital, pese a que los valores por cilindraje y tipo de carro se han mantenido igualitos desde 2016.

Pero más vale pagar en tiempo y forma si no quieren los dueños de carros que los del IP les claven aún más la daga con una multa que es de 500 pesos el primer mes, más 250 también mensuales de ahí en adelante; como si no fuera suficiente tener que lidiar con los cobros extorsivos de la ENEE y los costos de una canasta básica que anda ya por las nubes.