REDONDO TIENE CLAVO EN EL CONGRESO
Sin que haya supuesto una sorpresa para nadie, el CNA salió a denunciar el derroche sistemático de billete que ha hecho Luis Redondo Guifarro en el Congreso, donde con la paja de las subvenciones, subsidios y ayudas sociales ha repartido poco más de 314 millones de pesos entre sus diputados afines, sin que ninguno de ellos haya justificado cómo gastó el pistal recibido.
La que le peló la cara fue su gran amiga, Gabriela Castellanos, que en una conferencia de prensa exquisita detalló con pelos y señales el despilfarro, pese a que Redondo le hizo zancadillas, bloqueando sus intentos de conseguir “información clara y detallada” pese a haberle enviado en tiempo y forma un cachimbo de solicitudes que una a una fueron ignoradas por el conserje de Mel.
“Esos más de 314 millones de lempiras no se han gastado de manera transparente. El informe que hoy presentamos revela irregularidades en el manejo de estos fondos públicos en el tan aclamado Congreso Nacional” dijo la Gaby, que además reveló que pese al billetal repartido a lo loco por Redondo, ni siquiera guardan detalles de cuánto fue lo que se repartió y en qué lo invirtieron los que lo recibieron, si es que lo invirtieron de verdad.
Y es que saber a ciencia cierta ese pequeñísimo detalle es misión casi imposible, ya que, según Gabriela, cuando los llamaron para preguntarles, “los diputados en su mayoría han optado por el silencio”, y solo dos que tres pelones “han cumplido con su obligación de rendir cuentas” aún y cuando esa es su obligación.
En tal sentido, la acusación del CNA va para Redondo, a título de autor, por el delito de administración desleal del patrimonio público; y a los propietarios y suplentes que no rindieron cuentas del gasto por violación de los deberes de los funcionarios en perjuicio del buen funcionamiento de la administración pública.