REDONDO CRUCIFICA MOCIÓN CACHURECA
Al no encontrar un solo argumento creíble para impedir legalmente a los cachurecos interpelar a Roosevelt Hernández en el hemiciclo, el conserje de Libre, Luis Redondo Guifarro, optó por la más cínica de las justificaciones, aduciendo que la moción solicitada por los opositores “jurídicamente está al margen de la Constitución”.
Así lo dijo en X el domingo a altas horas de la noche, para agarrar a todo mundo descuidado, diciendo que la interpelación, pedida por el diputado Jorge Zelaya, “no cumple con los requisitos de la Ley Orgánica del Poder Legislativo”, y como ahí el que manda es él, o sea Mel, ya se pueden ir olvidando los azulejos de la idea.
Con semejante “análisis jurídico”, lo que logrará el conserje, sin embargo, es caldear aún más los ánimos de una bancada cachureca que fijo agudiza la insurrección legislativa que empezó hace semana y pico, pues saben que paralizar las tareas del Legislativo repercute directa y negativamente en la ovalada y ya mermada figura de Redondo.
Un Redondo que, incapaz de decidir por su cuenta, solo sigue la cuerda a sus patrones, insistiendo en que uno de los numerales de la moción los azules lo que demuestran es “su verdadera intención” de “provocar la destitución y un juicio político para desestabilizar las Fuerzas Armadas y por ende el Gobierno de la Presidenta Xiomara Castro”, como si eso fuera creíble teniendo en cuenta que la refundación controla todo lo habido y por haber.
Volvió Redondo así a pasarse la legalidad por el forro de los cataplines, poniendo en evidencia su rol de peón del comandante. No por nada andan los opositores diciendo que se ha convertido el salón legislativo en la oficina de trámites de Mel, pues a fin de cuentas como que es el que sigue llevando la batuta, por mucho que su gato salga a cada rato con la paja de sus “análisis jurídicos”.