“QUERIAN DEJAR A PAPI EN EL BOTE” LES SALIO EL TIRO POR LA CULATA

El Ministerio Público, de una forma traicionera había ordenado prisión preventiva, ya que, según sus cálculos, Asfura podría tener alguna afición por el turismo no autorizado.

Por esas mañas, el abogado defensor, Dagoberto Aspra, apareció cual caballero de brillante corbata para tildar de “desleal” al Ministerio Público por sugerir semejante cosa. “Nosotros traíamos bien fundamentado el soporte de arraigo y fianzas”, explicó Aspra, demostrando la inocencia de  “Papi”, dijo con ese acto solo han demostrado que si es una persecución politica.

Nasry “Tito” Asfura, mejor conocido como “Papi”, precandidato presidencial y exalcalde de Tegucigalpa, se salvó de pasar una temporada en el hotel de cuatro barrotes. Tras una audiencia de declaración de imputados, la justicia hondureña decidió otorgarle medidas sustitutivas a la prisión.

Claro, con una módica multa de 15 millones de lempiras y la obligación de firmar una vez al mes, no vaya a ser que se les escape.

El caso que casi manda a “Papi” a la sombra involucra un presunto esquema de lavado de dinero, donde más de 28 millones de lempiras habrían sido desviados de la Alcaldía Municipal del Distrito Central entre 2017 y 2018.

Según la acusación reiterativa los acusados son imputados por lavado de activos.

La audiencia inicial quedó agendada para el 4 de noviembre, y aunque aún no se sabe si será presencial o por videollamada desde alguna residencia exclusiva, lo cierto es que los dirigentes nacionalistas ya lo han dejado claro: “Esto es persecución política”. Y nadie detendrá al hombre de los burros que solo sabe trabajar.