PRINCESA LEONOR COMIENZA ETAPA DE FORMACIÓN CASTRENSE
«Hoy me incorporo, con gran ilusión, a esta Escuela Naval Militar para continuar con mi formación castrense», escribió la princesa Leonor, heredera del trono español, en el libro de honor de la escuela naval de Marín (noroeste de España) en la que inicia una nueva etapa en su carrera militar.
«Estoy segura de que aquí tendré la oportunidad de aprender mucho y compartir muchas experiencias importantes con mis compañeros de promoción», prosiguió, antes de despedirse «con afecto» y firmar: «Leonor. Princesa de Asturias».
La princesa, que fue recibida como alteza real para, pocos minutos después, convertirse en alumna, tuvo dos cambios de vestuario: los galones de guardiamarina en el blanco impoluto uniforme de la Armada dieron paso al uniforme de trabajo, a base de pantalón azul y camisa, con el que recorrió el complejo.
Tras saludos varios de presentación, Leonor mantuvo un encuentro de veinte minutos con el que va a ser su jefe, Erik Hellman Muñoz.
En su anterior fase de instrucción militar en la Academia del Ejército, Leonor no estuvo sola en su primer día, pero esta vez sí pues su padre, Felipe VI, se encuentra en Barcelona por la Copa América de Vela; su madre, la reina Letizia, en París, donde apoya a los deportistas españoles en los Juegos Paralímpicos, y su hermana, la infanta Sofía, volvió a Gales para estudiar su segundo año de bachillerato internacional.
Mañana viernes se levantará a las 6:45 horas (hora local) y tendrá cinco horas de clase matutinas, que empiezan a las 8:10 horas, y tres horas por la tarde. Dispondrá de una hora para comer y otra será de gimnasia.
A las 7:55 será la llamada ‘revista de policía’, donde se verifica que el uniforme está correctamente puesto. Antes, su cama (comparte habitación con tres compañeras) debe quedar hecha y tendrá que asearse y desayunar.
El día a día de Leonor, como también avanzó Cardona, será «un no parar» porque el régimen es «muy, muy intenso» y, por tanto, «no tienen mucho tiempo libre». El objetivo, en sus propias palabras, es alcanzar «un nivel de exigencia que es la excelencia».