PLEITOS POLÍTICOS LIMITAN LA INVERSIÓN

Por andar agarrándose de las greñas con todo mundo en vez de solucionar el cagadal que tienen montado en el país, el flamante gobierno refundidor catracho como que terminó espantando a los pocos valientes a los que alguna vez se les cruzó por la cabeza invertir su billete en estos arrabales.

Y no lo dice Al Filo sino los gringos, que recién sacaron su nuevo reporte “Clima de Inversión en Honduras 2024”, donde le sacan los trapitos al sol a quienes manejan la parte del desarrollo económico catracho, que parece ir en retroceso, destacando ellos la “incertidumbre significativa” que limita la inversión en estas tierras abandonadas por la mano de Dios.

“Honduras no promueve ni incentiva la inversión extranjera a pesar de las ventajas competitivas que ofrece, la incertidumbre política y legislativa ha restringido las oportunidades de inversión”, explica bien clarito el documento, que mucho han tardado los aludidos en salir a tildar de injerencista, como les gusta hacer.

Pero es que los gringos no son gente que habla por gusto, pues resulta que más de 200 empresas suyas en este patio han reportado dificultades perras para seguir rumbándole duro debido a las nefastas políticas refundidoras que, en vez de aplicarlas con base en análisis socioeconómico, las aplican por puro capricho de sus eruditos, que acostumbran a ver todo con sesgo ideológico y no con sentido común y conocimiento en la materia.

Porque todo lo emanado de los puestos clave del gobierno deriva, además, en puritita inseguridad jurídica y en un dolor de cabeza a la hora de querer acaparar dólares en el mercado, que últimamente cuesta verlos aún más de lo que cuesta ver a Xiomara inaugurando escuelas en vez de canchas.

“Las empresas informan que han tenido dificultades para acceder a suficientes dólares estadounidenses para pagar sus facturas y, en algunos casos, no han podido acceder a dólares para los pagos de deudas o la devolución de ganancias”, agrega el documento.

Un cagadal que ha propiciado el surgimiento de un creciente mercado negro, que es el que medio ha apañado estos días la escasez en las calles, mas no así la necesidad de las empresas, que ya se sabe que manejan elevadas sumas. Un cagadal, además, que el gobierno ha querido fulminar a punta de amenazas y no a punta de medidas eficientes, que sería lo lógico.

Pero no se le pueden pedir peras al olmo, así que tocará seguir apechugando hasta donde el cuerpo aguante, o hasta donde los políticos quieran, porque buena parte de la culpa, sino toda, la tienen ellos. Y no lo dice Al Filo sino también los gringos, que dan fe de que la percepción negativa se debe principalmente a la incertidumbre política que generan, por supuesto y de cajón, los propios políticos.

Y llegados a este punto es donde los gringos citan sin tanta paja al oficialismo, pues lamenta el informe que “el plan de gobierno del partido gobernante afirma que el capitalismo no funciona para la mayoría y busca cambiar el sistema económico fortaleciendo y haciendo crecer el papel del Estado en la economía”.

Y así, un sinfín de dolores de cabeza entre los que destacan con luz propia el agotamiento de las reservas por parte del Banco Central, lo que ha puesto las cosas aún más yucas. O las invasiones de tierra que siguen jodiendo la producción, o la crisis de la ENEE con los apagones. En fin, que la lista es larga y hay de dónde elegir. Pero mientras arriba sigan mirándose el ombligo, las cosas solo podrán empeorar. Que Dios nos guarde.