¡NO PEGAN UNA!
En su afán de querer ponerle su sello a todo lo que se menea, el gobierno de la refundición va dejando claro su rol de cagadalero máximo, por lo que el día que aterricen de culo en la llanura, harán falta toneladas de papel para documentarlo.
Por su soberana gana decidieron, hace un tiempo, pasar por la piedra a Diálisis de Honduras, empresa que, aunque sea trastabillando atendía a los pacientes renales, quienes acaban de pegar el pelotazo, pues la empresa reemplazante, la tal Nefrocentro, que cuenta con su visto bueno de los refundidores, ha hecho de la mala praxis su bandera.
Más o menos cinco decenas de ellos en la capirucha, y unos cuantos más en San Píter, fueron a dar con las tapas a los hospitales, porque acabaron en sus adentros con una bacteria acaparada por las medicinas pirujas que ahora les aplican.
Clara muestra de la incompetencia refundacional, que aun así no tolera que se le señalen sus planches porque son más sensibles que un clítoris, pero qué? en su paseo triunfal hacia el acabose, se van llevando de encuentro al que se les ponga por delante, porque lo importante para ellos es meter mano para luego andar saludando con sombrero ajeno.