NASRALLA VUELVE A RECULAR CON SU ANUNCIADA Y NUNCA CUMPLIDA PROMESA DE RENUNCIA

En un enésimo capítulo de su tragicómico historial como designado, Salvador Nasralla volvió a esconder la mano después de lanzar la piedra anunciando su salida oficial del gobierno.

Dijo esta vez el hombre que su recule respecto a poner su renuncia obedece a que no es algo que le convenga, sustentando esta vez su argumento en el hecho de que dice ser el único capaz de evitar el descalabro al cual la refundación está condenando al país.

Un descalabro que sólo es evitable dijo, valiéndose él de su cargo como primero en la línea de sucesión, aunque desde Presidencial lo único que han hecho es eructar en su cara y ese cargo del que tanto de ufana haya acabado siendo meramente un incómodo adorno.

Pero la catrachada a veces no gusta de tragarse la comida masticada y busca el más allá de las cosas, pues muchos son los que le tomaron la palabra al comandante vaquero, Mel Zelaya, cuando dijo que no le esperaría a Nasralla un camino sobre pétalos si es que algún día cumple su amenaza de renunciar.

Se interpreta así el asunto muy a las claras: la inmunidad que le provee su cargo es lo único que mantiene al designado en condición de decir todo lo que dice sin que le hayan salpicado las consecuencias.

Share via
Copy link