LOS PAGOS DE LA VERGÜENZA
Calladito ha estado Carlón recibiendo nada más y nada menos que 175 mil maracandacas de sueldo mensuales de parte del Congreso, mismo del que renunció en agosto del año pasado, cuando ya sentía pasos de animal grande encima, con la revelación del tristemente célebre narcovideo donde le sacaron a pasear sus trapos más sucios.
Los pagos, depositados puntualmente a su cuenta desde las arcas del Legislativo, las recibió el hombrón el 15 de noviembre y el 15 de diciembre del año pasado, así como un tercero el 17 de enero de este año y un último hace un par de días, sumando en total 700 mil pesos sin ton ni son.
Al ser consultados por los de Contracorriente, que fueron los que descubrieron el tamal, tanto Hugo Noé Pino como Rasel Tomé, ambos de la Junta Directiva del Congreso, se hicieron los papos, aduciendo que nada saben del tema en cuestión; aunque en el caso del primero, tampoco negó que aún desempeñe el cuñado presidencial alguna función en el hemiciclo.
Sea como sea el asunto, la única certeza hasta ahora es que el descaro de los involucrados no tiene límites, pues atreverse a tanto sabiendo la cruz que cargan en el lomo está al alcance de muy pocos. Será que esa es una de las ventajas de ser Carlón pariente de ya se sabe quiénes.
Lo peor de todo es que no es la primera vez que una noticia de este calibre sacude el entorno del hermano de Mel, pues pese a que su renuncia en el Legislativo se tramitó hasta mediados de septiembre del año pasado, también como que se mantuvo cobrando el hombre unos meses de chascada, aunque no tanto como ahora.
Y es que, hasta donde se sabe, ningún diputado del Congreso devenga tal billetal, por lo que los pagos a Carlón resultan especialmente sospechosos, y sin que nadie, ni dentro ni fuera del hemiciclo, dé razón del por qué o para qué.