LOS COLORADOS VAN CON TODO
Sin mayores contratiempos, los cuatro colorados en discordia inscribieron sus planillas en la sede del Central Ejecutivo con la mira puesta en las internas del 9 de marzo, que será cuando se reparta todo el queso y se sepa finalmente quién es quién, para quedarse con la nominación única del partido.
Uno por uno fue llegando todos ellos, cargados de cajas hasta la pata de firmas y envalentonados por el griterío de sus partidarios, como atestiguó Maribel Espinoza, que fue la primerita para apuntar a su movimiento Todos por Honduras, con el cual busca “promover nuevos liderazgos que fortalezcan al partido”, según dijo.
Poco después aterrizó Luis Zelaya, con algo más de pena que de gloria, pues incluso Maribel llevó más gente detrás. Y es que apenas una veintena de los suyos le echaron la vaca, la mayoría de ellos del ala resentida del partido que encarna Luis, que por su parte personifica el ala troyana.
Pero el primer plato fuerte también llegó por ahí, cuando Nasralla y su séquito hicieron acto de presencia exhibiendo músculo, sabedores de que la guayaba colorada estará entre ellos y los calixtos. Llegó el hombre con toda la parafernalia que lo caracteriza y repitiendo como lora su habitual discurso triunfalista, que a ver si no le acaba pasando factura.
Y, por último, pero no por eso menos importante, Jorge Cálix, que montó un show como si se estuviese proclamando ganador de algo, y franqueado a diestra y siniestra por el Pollo Contreras y el doctor Chirinos, con quienes buscará acapararse la guayaba de las dos principales ciudades del país.
Una vez inscritos los cuatro, el balón está en el aire, con dos claros favoritos, una que apela a su transparencia para ver si saca alguito, y el caballo de Troya, que para esa gracia mejor se hubiera inscrito en Libre, donde apenas hay dos en la pelea.