HÉCTOR RECUERDA A GABRIELA SU PASADO OSCURO
Héctor Zelaya, el hijo pródigo de la refundación, demostró nuevamente que su estrategia de cara a una futura postulación presidencialista consiste en no rajarse ante ningún pleito mediático, pues sabe que es su mejor baza para mantenerse vigente. Y si no, que se lo digan a Gabriela Castellanos, la jefa del CNA, a quien respondió por los señalamientos de nepotismo que hizo ella no solo al familión Zelaya-Castro, sino también por otros no tan famosos como el de Rixi Ramona y el de Enrique Flores Lanza.
En tal sentido, recordó Héctor que “el Gobierno anterior metió una acusación de malversación de fondos a la directora del CNA por favorecer a familiares”, haciendo referencia a la supuesta relación de dientes afilados que había entre Gabriela y el indómito Juan Orlando; pero a la vez, contradiciendo inocentemente el propio discurso oficialista, que habla de un trato casi idílico entre la directora y el exmandatario.
Y de ese modo el primogénito de la parejita presidencial anda queriendo justificar el hecho de que sus parientes tengan invadido el organigrama estatal con una docena de representantes, porque según él “es un tema que no hace ningún tipo de daño”, aunque solo mida con esa vara cuando se trata de ellos mismos, porque a Juan Orlando solía atizarlo sin piedad por haber tenido enchufada a su hermana Hilda.
En fin, que, según él, todos y cada uno de los integrantes del castrozelayismo enchambados actualmente en el gobierno se han ganado a pulso su derecho de estar donde están, porque “desde el 2004 que el presidente Manuel Zelaya empezó su campaña, estamos involucrados activamente en la política”, aunque los miles de borregos que se partieron el pecho por ellos en las calles no gozan de semejante privilegio.
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