HASTA EL GORRO DE APAGONES

Hasta el mismísimo sereguete están ya los sampedranos con tanto apagón, que los pone a sudar la gota gorda durante horas, pues cada uno compite en duración con el anterior, hasta sacar el lado más desquiciado de los afectados, que no pueden ya ni enfriar las amargas a gusto.

Y no hay tales de que la situación tenga pinta de que vaya a mejorar, como anda diciendo el cínico Tejada, pues los cortes son ya frecuentes hasta de noche, cuando la ciudad queda cubierta por una sola oscurana y un manto de calorcito extremo que manda a muchos al rincón de los desvelados.

Porque, para colmo, al veranito le ha dado por ponerse interesante, con 35 grados de sensación térmica desde buen cinco de la mañana, por lo que el mal genio de muchos sale a relucir de volada, pegando el pelotazo en la imagen de la comandanta Castro, como cara más visible del cagadal.

Lo divertido será cuando vuelvan por esos arrabales a pedir el voto, haciéndose los majes, sin siquiera haberse molestado en medir el alcance de su desinterés por una urbe que, por sí sola, es capaz de poner patas arriba unas elecciones con su caudal de votos.

Y mientras en el Congreso sigan cociendo la mandracada de la tal “Brassavola”, tocará a los pobres sampedranos seguir asándose y tirando a la basura las carnitas y las verduras descongeladas; algo que a mediano y largo plazo será como habernos dado un balazo en el pie, pues pese a todo sigue siendo San Peter el granero que alimenta las insaciables bocas que gobiernan desde la capirucha.

Share via
Copy link