GRAN RETOCESO

¿A quién se le ocurre frenar la extradición? Se pregunta el exvocero de la desaparecida Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), Juan Jiménez Mayor, quien cuestionó la última jugada maestra del gobierno hondureño. ¿Y cuál es esa movida? Nada menos que la denuncia del tratado de extradición con Estados Unidos, lo que Jiménez Mayor considera un “gran retroceso”.

Como si no pudiera entender la brillante estrategia detrás de esta decisión, el exvocero se atrevió a preguntar: “¿Cuál puede ser una razón objetiva para impedir la extradición de nacionales?”.

Algunas voces le contestan …Vamos, Juan, ¿no ves que aquí las cosas se manejan a otro nivel? Tal vez, en un universo paralelo, evitar que los narcotraficantes enfrenten a la justicia en el extranjero tiene algún sentido lógico, pero aquí, todo es parte de un plan más grande, incomprensible para los simples mortales.

Jiménez Mayor, con su pragmatismo peruano, parece no captar la sutil genialidad detrás de esta movida. Señala, con una lógica casi exasperante, que los narcotraficantes son criminales que deben ser juzgados por jurisdicciones internacionales. No aprendió a lo catracho y no entiende que, en Honduras, todo es posible, incluso permitir que los criminales se sientan más seguros en casa que en cualquier otro lugar.

Y, como si fuera poco, se atreve a decir que estas decisiones fomentan el crimen y la impunidad. Claro, porque nada dice “adelante, chicos” como darles a los narcotraficantes la tranquilidad de saber que no serán extraditados.

Así, mientras unos se escandalizan, otros solo ven en esto otro día más en el surrealismo político hondureño.