FMI, HONDURAS Y LA CARRERA POR LA FOTO: ¿QUIÉN SONRÍE PRIMERO?
El economista Roberto Lagos, con su característico toque de ironía, ha revelado que el Gabinete Económico de Honduras está haciendo malabares con la economía para atraer la atención del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Según Lagos, el objetivo es claro y nada menos que audaz: conseguir que el FMI se digne a visitar Honduras lo antes posible, cuál celebridad esperada en la alfombra roja.
El primer truco de magia económica ocurrió el 5 de agosto, cuando el Banco Central de Honduras (BCH) subió la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 100 puntos básicos. Pero claro, como en todo buen espectáculo, esto fue solo un aperitivo, ya que el FMI ha dejado caer pistas de que quiere algo mucho más impactante, algo del orden de 400 puntos básicos. No pues ¿Por qué conformarse con menos cuando se puede pedir más?
Lagos no se contuvo al señalar que la caída en las reservas internacionales y la falta de revisiones del acuerdo con el FMI forzaron al Gabinete Económico a dar este primer paso. “Este es el primer guiño del Gobierno, una invitación a la pista de baile para intentar rescatar el acuerdo con el FMI y convencerlos de que Honduras merece su atención”, bromeó Lagos, como si las negociaciones fueran una especie de cortejo diplomático.
El economista también destacó que agosto podría ser el mes en que la trama se complique aún más, con el tipo de cambio bajo la lupa. Si la moneda sigue en caída libre, esto podría ser el “mensaje final” que el FMI está esperando para decidir si hace las maletas y visita Honduras. Porque, al parecer, nada dice “ven a verme” como una buena crisis cambiaria.
Lagos también lanzó un dardo afilado al señalar los incentivos detrás de todo esto. El coordinador del Gabinete Económico, al parecer, necesita la visita del FMI más que un café por la mañana, especialmente antes de asumir un nuevo cargo en el Consejo Nacional Electoral (CNE). Después de todo, ¿quién quiere ser recordado como el que no logró la tan ansiada foto con el FMI en Casa Presidencial?
Sin embargo, Lagos advierte que, si el FMI llega a Honduras, no vendrá de vacaciones. “Exigirán corregir el atraso cambiario y seguir ajustando la TPM, y no habrá espacio para hacer las cosas con calma. Será como intentar arreglar un auto en plena autopista”, comparó el economista, dejando claro que cualquier corrección será dolorosa para la población.
Finalmente, Lagos lanzó la pregunta del millón: ¿El próximo coordinador del Gabinete Económico, que será elegido en septiembre, estará dispuesto a seguir los pasos de su predecesor y cumplir con los ajustes negociados con el FMI? O, mejor aún, ¿será todo esto una táctica para ganar tiempo, obtener derechos especiales de giro, emitir un bono soberano y dejarle el marrón a la próxima administración? “El tiempo dirá”, concluyó Lagos.