FÁTIMA QUEDA A CARGO EN EL PSH

La diputada Fátima Mena será quien a partir de ahora se hará cargo de los despojos que quedaron del PSH en el Congreso tras la vacante dejada ahí por Joshy Toscano, que pintó llantas junto con Nasralla e Iroshka en busca de una vida mejor en el Partido Liberal.

Quien confirmó el recambio fue el también diputado Tomás Ramírez, a quien el propio Nasralla había señalado por traidor luego de los coqueteos de éste con el malandro Luis Redondo, que lo sedujo hasta convertirlo en miembro de su directiva de tinte refundacional.

“Cuando hay liderazgos y se va un líder, el grupo se recompone”, dijo Tomás, al tiempo que explicó que, de todos modos, a Toscano ya le tocaba ahuecar el ala como jefe de la bancada, pues ese fue el acuerdo al que llegaron cuando acapararon todos ellos un curul en el hemiciclo.

Pero tampoco es que hay que darle tanta vuelta al asunto, pues el nombramiento de Fátima como nuevo capataz se produjo de modo automático tras la salida de Joshy: “La abogada Fátima Mena fue nombrada vicepresidente de bancada, así que a la salida del diputado Joshy Toscano, ella asume de manera inmediata”, explicó.

Y como una cosa lleva a la otra, el puesto de vicepresidente dejado por Mena lo suplirá Carlos Umaña, quien hace apenas tres meses había sido nombrado relacionador público, como todo buen indio superado.

Se trata, pues, de un movimiento de piezas en el tablero que iría todavía más allá, pues la idea de los tres pelones que aún quedan en el partido es “repatriar” a Matheu y Ligia, quienes se fueron del partido por cuenta propia tras saborear las mieles que les ofreció la refundación, donde han sido menos útiles que un rollo de alambre.