EXIGEN CUENTAS CLARAS AL GOBIERNO
Que si tan seguros están de hacer las cosas como Dios manda, que entonces colaboren con los organismos electorales para demostrar que el proceso es transparente les salieron diciendo los de la Red por la Defensa de la Democracia (RDD) al gobierno refundidor, en vista de que estamos ya a apenas cuatro meses y pico para las internas.
Esa fue una de las conclusiones extraídas del informe que presentaron este miércoles, en el que además pidieron a Rixi Ramona Moncada renunciar a sus aspiraciones presidencialistas, por ser parte de un evidente “conflicto de intereses”, al ser ministra de Defensa y precandidata de la refundición al mismo tiempo.
“Creemos que lo más sano sería apartarse de los cargos (…) para evitar que se pueda tener la posibilidad de influencia del proceso electoral con ese campo de conveniencia o el conflicto de interés que podría existir en ese sentido” dijo al respecto César Espinal, del CNA, una de las organizaciones que integran la RDD.
Pero el informe también destaca otro cachimbo de hallazgos, todos ellos sobre temas electorales, como el financiamiento de los candidatos para sus campañas, ya que no hay manera de saber de dónde sacan tanto pisto para concentraciones y demás menesteres proselitistas. “Tienen que brindar el apoyo necesario a las instituciones que se dedican al proceso electoral” les exigió Gustavo Solorzano, del CAH.
La RDD, conformada por 17 organizaciones de sociedad civil, iglesias, academia, sector privado, movimientos de mujeres, jóvenes y gremios, también tuvo chance de exigir al gobierno refundidor respeto a los derechos humanos y restablecer el Estado de Derecho, pues por mucho que en sus discursos se llenen la jeta diciendo que lo cumplen, lo cierto es que andan por la veinte en ese aspecto.
La ASJ, que es otra de las que también anda metida en el rollo, además explicó a través de Carlos Aguilar, su jefe, que el informe también incluye un monitoreo del proceso digital y de los espacios cívicos en el que se identificaron unos 217 eventos políticos realizados por precandidatos, de los cuales se desconoce quién puso el billete para organizarlos.
Es decir, la cosa está bastante yuca, ya que por si fuera poco ni siquiera le han asignado el presupuesto a la Unidad de Política Limpia (UPL), que requiere de ese pistillo para velar que no haya mano peluda en el asunto. Mismo caso que el CNE, que al no tener la plata no puede contratar e implementar sistemas críticos, como el dichoso TREP y el sistema biométrico para transparentar los comicios venideros.