EXCESOS REFUNDACIONALES

Recién se supo que el gobierno refundacional de la austeridad se gastó una millonada de pisto en la compra de nueve drones para el 911, al tiempo en que va por ahí, sacando pecho y jalando las orejas a sus funcionarios cuando estos arman pachangones privados.

La grosería de pisto supera los 1.3 millones y consta de siete chunches no tripulados que dizque reforzarán a la inútil y desbordada policía refundacional, además de otros dos que, según la paja que salieron contando, son capaces de llevar medicinas hasta lugares medio lejanos en casos de emergencia.

No aclararon, sin embargo, si también están en condiciones de aguantar dos chimbazos de un marero malhumorado o si en las bodegas hospitalarias realmente hay medicinas para que las transporten, porque al igual que los peajes, las prioridades también son soberanas y nada tienen que ver con tener al pueblo aguantando hambre y buscando chamba.

El primer lote llegará el mero 15 de febrero, en plena resaca sanvalentinesca, y aunque lo mejor hubiese sido no abrir las tapas, dijo la interventora Miroslava Cerpas que no son drones al uso, sino aeronaves solo manejables por mentes maestras como las que la refundación cuenta por montones en su imaginación.

Mientras tanto, las matemáticas mandan a decir que la broma sale a casi 145 mil pesos por cada chunche, que no será mucho pisto para quien cree que la libra de pollo cuesta siete pesos, pero que en la llanura se traducen a un cachimbazo de arroz y frijoles para poner en la mesa.