“EVISTAS” CORTAN CARRETERAS EN CONTRA DE AMENAZA DE ARRESTO
Los seguidores de Evo Morales tensan la cuerda con el Gobierno de Luis Arce. Desde este lunes, campesinos cocaleros cortan la mayor parte de la carreteras que comunican el Chapare, bastión político del expresidente, con el resto de Bolivia. Manifiestan así su rechazo a la intención del Estado de detener a Morales para enjuiciarlo por un presunto caso de “estupro agravado con trata de personas”. Las autoridades judiciales han emitido además una “alerta migratoria” para evitar que salga del país. El líder indígena está refugiado en su hogar en Villa Tunari, una pequeña ciudad que vive de la coca y el turismo en Chapare. Los dirigentes declararon a la televisión que buscan “resguardar la libertad, integridad y (evitar) el secuestro” del presidente del Movimiento al Socialismo (MAS).
La policía ha reprimido con gases lacrimógenos un bloqueo en Parotani, un pueblo cercano a la ciudad de Cochabamba que no está en el área de cocales. Los bloqueos en esta área, en cambio, que cuentan con el apoyo directo de la población, no han sido interferidos por las autoridades.
Los cortes de carreteras tienen como objetivo que el Gobierno de Luis Arce resuelva dos aspectos de la crisis económica que vive el país: la falta de dólares y la escasez de combustibles. Por esta razón, Arce convocó a su ex mentor político y ahora irreconciliable enemigo a un diálogo para tratar las demandas “evistas” que no tengan que ver con el proceso judicial en contra del expresidente. La invitación también es para otros cinco dirigentes, de modo que los “evistas” no sospechen que se trata de una argucia para detener al expresidente. Evo Morales no asistirá, pero Arce lo esperará a la hora establecida ante las cámaras de televisión.
La Fiscalía de Tarija investiga a Morales porque supuestamente tuvo una hija con una adolescente de 15 años a la cual accedió, según la demanda, haciéndole favores políticos a sus padres. Según la acusación, esto sucedió cuando Morales era presidente y tenía 56 años.
El padre de la supuesta víctima se encuentra en prisión preventiva porque no se presentó a declarar, mientras que la madre sigue siendo buscada por la policía. Evo Morales tampoco asistió a la citación de la fiscalía y es por ello que enfrenta una orden de arresto. Desde entonces, el Chapare y los cocaleros se han movilizados para impedirlo. Uno de los dirigentes amenazó con “incendiar el país” si su líder era buscado por la policía