EN HONDURAS TODO ES POSIBLE

En Honduras, donde la realidad supera la ficción, el exministro de Transparencia y exfiscal de la República, Edmundo Orellana, ha decidido compartir su confusión sobre la última movida del gobierno de Xiomara Castro.

Esta vez, la novedad es la figura del “acusador privado”, presentación como parte de la propuesta de la CICIH que Castro entregó al secretario general de la ONU, Antonio Guterres. Pero según Orellana, ni siquiera él, con años de experiencia, tiene claro de qué se trata este.

“Yo no entiendo qué es lo que se está pidiendo”, confesó Orellana, haciéndose eco de un sentimiento que muchos compartimos cada vez que leemos sobre nuevas propuestas legales en el país. Es que, en Honduras, cualquier cosa puede pasar. “Aquí no reforma la Constitución el Congreso Nacional, sino la Sala Constitucional”, agregó el exfiscal, como si ya nos hubiera quedado alguna duda.

Orellana señala, que en casos de corrupción la “víctima” no es una persona en particular, sino toda la sociedad. Y resulta que el MP, teóricamente, es el encargado de representarnos a todos. Pero, la pregunta sería ¿quién necesita al MP cuando puedes tener tu propio acusador privado como si fuera un bufete personalizado?

“El problema son quienes están aconsejando”, dijo Orellana, tal vez refiriéndose a esos gurús de la política que parecen pensar que la Constitución es un menú del día. “No entiendo qué es lo que realmente se está proponiendo”, reiteró, antes de concluir con el ya clásico: “vamos a ver qué dice la ONU”, que en hondureño se traduce como “aquí nadie sabe qué va a pasar, pero lo más seguro es que quede la CICIH durmiendo el sueño de los justos.

Con el caos constitucional siempre a la vuelta de la esquina, lo único que queda claro es que, en Honduras, absolutamente todo es posible, claro está para beneficio particulares porque para el pueblo solo trancazos