EL GOBIERNO DE LA PAUTA

Anda el gobierno de la refundición apareciéndose hasta en la sopa con tanta pauta pagada en los oligárquicos y monopólicos medios de comunicación, a los que tanto desprecia públicamente, pero a los que siempre acude para que sirvan como caja de resonancia a sus ideas del siglo 15.

En esas andan de nuevo, azuzando a su borregada desde todos los frentes para que se echen el hambre al hombro y salgan a marchar el 1 de mayo, y robarse en las calles el protagonismo que debiera corresponder a una clase obrera que anda bajoneada por la pasividad de sus dirigentes ante, precisamente, los líderes refundidores.

Encienda usted la radio, dese una vuelta por las redes sociales, cambie de canal en su televisor o compre el periódico en la esquina para que al cabo de 15 minutos acabe asqueado y prendiendo fuego a una llanta en plena calle, exigiendo que la riqueza sea equitativamente distribuida mientras ellos se la vuelan en pura pauta publicitaria.

Y así exigen que se les crea cuando el comandante vaquero aparece en modo soberbio, puteando gente por pedirle dinero para maquillar sus comunidades, pues en su perversa lógica no hay billete más que para sus vainas, ya que lo que había se lo voló la vieja confiable: la “narcodictadura”.

Calle