ECONOMÍA “EN PICADA” SEGÚN STANDARD & POOR’S

Honduras sigue en su montaña rusa económica, y esta vez la agencia calificadora de riesgos Standard & Poor’s ha decidido que es hora de darnos un buen “tirón de orejas” bajando la calificación de la percepción economía hondureña de “estable” a “negativa”.

¿La razón? Pues según los expertos, estamos “hechos porra”. Y para colmo, ahora no solo tendremos menos inversiones, sino también más problemas para conseguir esos créditos anhelados, porque los tales bonitos que les encanta andar colocando quedan hechos chatarra es decir no valen nada.

El reporte no se anda con rodeos y apunta a que el “estado de derecho débil, la incertidumbre política y la percepción galopante de corrupción” están jugando en contra del crecimiento económico del país.

Pero, claro, eso no es lo más grave, porque ya estamos acostumbrados a esas noticias. Lo que realmente tiene a los analistas al borde del colapso es la falta de responsabilidad de los exjefes del Gabinete Económico.

Nada menos y nada más que la flamante y todopoderosa precandidata de Libre Rixineta Moncada, junto a su alumno, el flamante “Nerón” que más que apagar los incendios, parece que les echa gasolina.

Los expertos sugieren que se debería pedir cuentas a este dúo dinámico y, sobre todo, que no nos vengan con las viejas historias de la “narcodictadura de 12 años” ni con el consabido repertorio de la pijamada política. ¡No señores! Esta vez queremos respuestas y no cuentos chinos. Porque si seguimos así,  las inversiones extranjeras, seguirán volando en cualquier parte del espacio menos en Honduras.

El reporte de S&P suelta también algunas joyas, como que el debilitamiento del apoyo político y la polarización harán que el gobierno se quede sin fuerzas para aprobar las tan necesarias reformas antes de las elecciones de 2025. Y si todo esto no fuera suficiente, la eliminación de las ZEDE por la Corte Suprema y la salida de Honduras del CIADI están ahuyentando aún más la inversión privada.

Pero todavía hay más. S&P nos advierte que las reservas internacionales podrían caer en picada si seguimos sin acceso al financiamiento externo. Vamos, que, si antes estábamos mal, ahora podríamos estar peor.

En resumen, el panorama no pinta bien, y si los refundadores siguen con  la estrategia de mirar hacia otro lado, echando culpas hasta los astros nos refundirán cada día más.