DIPUTADAS SE FAJAN LOS PANTALONES
Toca hacerse un nudo, por todas. Diputadas sacan la cara por mujeres, ya que la primera presidenta mujer de Honduras, no ha hecho nada por la población femenina del país, que representa el 52 por ciento de la población. La Xiomi salió puro tilín, tilín y nada de paletas.
Para más el Congreso por el que nadie da un peso. En una sesión especial, para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, el Congreso Nacional, aprobó una iniciativa legislativa, para reformar los artículos 4-A y 4-B del Decreto No. 132-97, de la Ley Contra la Violencia Doméstica y la Ley de Casas Refugio para mujeres sobrevivientes de violencia. Se fajaron los pantalones y se acordaron de legislar.
Será que la cuaresma hablando a algunos diputados machistas, que apoyaron las iniciativas de sus compañeras. Honduras es un país machista, donde se ha demostrado que ser mujer, es un riesgo. Por ello, las reformas, aprobadas en la sesión rosa, están orientadas a fortalecer la protección y atención a las víctimas de violencia doméstica e intrafamiliar en todo el territorio nacional.
Postas seguras, porque los chepos también son abusadores. Esta reforma viene a fortalecer el sistema de respuesta estatal ante la violencia de género, al establecer la obligación para las postas policiales distribuidas estratégicamente en cada colonia, barrio o comunidad del país, de recibir y procesar de forma inmediata las denuncias relacionadas con violencia doméstica e intrafamiliar. En un ambiente seguro para las víctimas.
Esta reforma manda a agilizar la respuesta estatal y asegurar una atención rápida y eficaz a las víctimas. Se espera que esta reforma legislativa tenga un impacto significativo en la prevención y combate de la violencia de género en el territorio nacional, considerando la alarmante cifra de casos reportados en el país durante el año en curso.
Hay que hacer destacar que, en la sesión, las diputadas contaron con el apoyo de toda la junta directiva, organismos internacionales que trabajan por los derechos humanos y el movimiento de mujeres, precursor de estas reformas que tenían una década de estar engavetadas, como la Ley de Casas Refugio. El gran ausente fue el Presi Luís Redondo que se supone anda en los yunai atendiendo una demanda por alimentos. A propósito de los derechos de la mujer.