DAVID CHÁVEZ MANZANA DE LA DISCORDIA
El exdirigente del Partido Nacional, David Chávez, ha hecho su gran reaparición en Honduras, y lo más sorprendente no es su regreso, sino la velocidad con la que sus problemas judiciales han desaparecido, como si un mago hubiera dicho: ¡Abracadabra, requerimientos fiscales, desaparezcan!
El analista político Marvin Ponce, con su característico olfato para detectar conspiraciones, sugirió que esta arrepentida limpieza de expedientes no es casualidad. Según él, todo forma parte de una maniobra política para desestabilizar al Partido Nacional y garantizar que el oficialismo llegue sin sobresaltos a las próximas elecciones.
“Lo que se busca es provocar una crisis en el Partido Nacional para debilitar la oposición y que Libre se posicione mejor”, advirtió Ponce, insinuando que la llegada de Chávez, quien estaba siendo investigado por irregularidades en el INFOP, es más misteriosa que el presupuesto de algunas instituciones públicas.
Pero aquí viene el verdadero truco: nadie logra que le eliminen una alerta migratoria y una orden de captura sin siquiera despeinarse. “Eso no pasa todos los días, esto tiene que ser un acuerdo político de alto nivel”, dijo Ponce, con la misma certeza con la que un aficionado al fútbol predice que su equipo ganará el próximo mundial.
La estrategia, según el analista, no solo apunta a desmantelar al Partido Nacional, sino también a debilitar al Partido Liberal y a figuras como Jorge Cálix y Salvador Nasralla. “Libre está jugando al ajedrez y parece que algunos están en un torneo de damas chinas”, comentó Ponce, mientras advertía que el partido de la estrella solitaria podría estar cavando su propia tumba si no maneja bien la crisis.
Y por si fuera poco, Ponce menciona la existencia de los famosos “cuarentones” dentro del Partido Nacional, un grupo de políticos jóvenes que, según él, prefieren esperar su turno para gobernar y mientras tanto piensan en convenientes alianzas pero en fin advierte que el Partido Nacional está peor ahora con Chavez y es como el barco que tiene un agujero, pero el capitán sigue tocando el violín; sino se ponen vivos se hunden