CULPABLE JOH

 

Crónica de una muerte anunciada el expresidente Juan Orlando Hernández, fue declarado culpable por el jurado de los tres cargos que se le acusaba en la Corte de New York, y la primera temporada de la serie llega a su final.

Aunque el desenlace ya prácticamente se conocía la noticia sacudió a Honduras como un terremoto político de magnitudes épicas.

Todo mundo salió como abejas de panal espantado a opinar y a darse baños de pureza y condenar al condenado.

¡El expresidente Juan Orlando Hernández, aquel hombre que una vez prometió luchar contra el narcotráfico, fue encontrado culpable de… bueno, narcotráfico!

Sí, el mismo individuo que alguna vez se pavoneó ante las cámaras jurando erradicar el crimen organizado, ahora se encuentra en el otro lado de la ley, encontrado culpable de haber conspirando para importar cocaína a los Estados Unidos.

¡Qué ironía! Parece que su estrategia para combatir el narcotráfico consistía en convertirse en su propio proveedor.

Pero eso no es todo, la lista de cargos parece un menú de degustación de la peor pesadilla de un político: conspiración para usar y portar ametralladoras y dispositivos destructivos, y para rematar, posesión de armas de fuego. Parece que Hernández no solo quería traficar drogas, sino que también deseaba protagonizar su propia película de acción estilo Hollywood.

Y aunque esta primera parte de la serie llegó a su final los ciudadanos de Honduras quedan boquiabiertos al ver de qué han sido capaces los políticos.

Ahora la población no puede evitar preguntarse: ¿qué sigue para el país? Ya con un presidente condenado con un historial en el mundo del crimen organizado, ¿será que tal vez hay un giro de la clase política sorprendente hacia la honestidad y la integridad? Esto último claro es una vana ilusión que llega a utopía.