CONTRIBUYENTES INSPECTORES FISCALES

El Servicio de Administración de Rentas (SAR) ha emitido un recordatorio: los contribuyentes que solicitan documentos fiscales a través de la siempre confiable modalidad de “impresión por imprenta” deben ahora asumir el rol de inspectores fiscales.

Así es, señoras y señores, además de pagar impuestos, ahora deben asegurarse de que esos documentos estén debidamente activados antes de usarlos, porque, al parecer, el SAR ha decidido que la confianza en las imprentas tiene sus límites.

Con el respaldo del glamoroso Acuerdo 481-2017, que regula hasta cómo respirar cuando se maneja documentación fiscal, el SAR nos insta, casi con cariño, a verificar la activación de los documentos fiscales al recibirlos.

Y no, no se confíen en que la imprenta haya hecho su trabajo. Si esos documentos no están activados, sepa usted que no valen ni para hacer aviones de papel. Así que, a ponerse el sombrero de detective y revisar cada papel con la misma dedicación que un detective en una serie de televisión.

¿Y cómo se hace esta magia? Muy simple, basta con entrar a la oficina virtual del SAR, navegar hasta “Mi facturación”, luego a “Solicitudes finalizadas”, y esperar que los documentos aparezcan como por arte de magia. Si no los encuentra ahí, no se preocupe, simplemente llame a la imprenta y pida que, por favor, activen esos valiosos papeles.

Por último, en un giro digno de un final inesperado, el SAR nos invita a denunciar cualquier anomalía que encontremos. Si siente que la imprenta no está jugando limpio, puede reportarlo a través de su página web o enviar un correo electrónico. Porque en el mundo del SAR, todos somos vigilantes fiscales en potencia.