CONGRESO, OFICINA DE TRÁMITES

El circo en que Luis Redondo Guifarro ha convertido el Congreso desde que fue impuesto ilegalmente en el cargo por la refundación, no solo es el epicentro de la chabacanería y el desorden, sino también “la oficina de trámites” donde Mel hace sus movimientos para sacar tajada, criticó la colorada Maribel Espinoza.

Porque pocas dudas hay ya respecto a quién es realmente el que mueve los hilos de la vida política catracha, lo que por descarte deja a Redondo meciéndose en su hábitat natural como auténtico mandadero con disfraz de jefe, confirmando así las sospechas de quienes nunca le han dado la importancia que merecería un verdadero patrón del Legislativo.

Pues bien, en ese afán, como decíamos, emerge la figura del comandante vaquero, quien según Maribel es un personaje siniestro y desvergonzado a partes iguales, que “no respeta la ley porque cree que Honduras es su potrero particular”, pero a quien de todos modos se le acabará la changoneta “cuando el pueblo lo juzgue en las urnas”.

Porque si algo dice Maribel que tiene claro es que Mel lo que en el fondo anhela es “que seamos como Nicaragua, como Venezuela”, y para darse cuenta de eso solo hace falta “ver las señales”, refiriéndose ella a los derroteros que parece ir adoptando el gobierno pseudo dirigido por Xiomara, a quien de paso pidió Maribel “que se agarre los pantalones”.

Por tanto, pide la colorada a sus compañeros de hemiciclo no desenfocarse y no darle al gobierno “una excusa para que rompa el orden constitucional”, y en ese sentido es con votos y no con otra cosa que tocará extirparlos de un poder que creen merecer, aunque no hagan nada para demostrarlo.

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