CARA A CARA

Rixi Ramona y la embajadora gringa, Laura Dogu, como que ya le agarraron el gustito a eso de andarse reuniendo hasta por gusto, pues en las últimas semanas ya van varios encuentros entre ambas, los cuales han sido aprovechados por la ministra-precandidata y el gobierno refundidor al que representa para sacar pecho por lo bien que se llevan con el imperio.

Este miércoles tuvo lugar un nuevo capítulo de la saga, en el que según la versión oficial las dos comadres hablaron sobre la actualización de proyectos y programas que desarrollan conjuntamente ambos países, y todo ello con el jefe del Estado Mayor Conjunto, Roosevelt Hernández como testigo de honor de la cháchara.

Según las gloriosas Fuerzas Armadas refundacionales, esas reuniones “son el reflejo de los mejores canales de comunicación, coordinaciones y apoyo” existente entre gringos y catrachos, discurso que los pone en evidencia por lambiscones, incapaces de arrastrarse más pero solo por el hecho de no haber más suelo para hacerlo.

Pues resulta que, en ese afán de quedar bien con el imperio, el equipo de relaciones públicas tuvo que meterle ceso a lo que publicaron, pues en las redes el discurso confrontativo que exhiben los refundidores en el día a día dio paso a uno más conciliador y rastrero, asegurando que las comadres hasta tuvieron chance de buscar “mejores soluciones” para combatir asuntos picantes “como el narcotráfico y el terrorismo trasnacional”.