CANDIL DE LAS CANCHAS, OSCURIDAD DE ESCUELAS Y HOSPITALES

La “presi” como que ya le agarró el gustito a eso de andar figurando en inauguraciones, cumbres y asuntos sociales varios; pero será lo único, porque a los hospitales y las escuelas nunca asoma la nariz.

Su más reciente aparición fue en el Estadio Morazán, donde el hermano de Rixi tiene amontonada la arena desde hace meses. Llegó ahí desde Talanga, tras calcar el protocolo. Bueno hubiera sido verla adentrarse un poco más arriba de “Jampedro”, donde el Catarino clama por medicinas y jeringas.

Pero no, las prioridades de la refundación mandan a otras cosas, que nada tienen que ver con gobernar haciendo uso de sentido común y una pizca de empatía para con esos incautos que le confiaron el voto, quien sabe si por última vez.

Donde también hace buena falta verla posar es en las escuelas, que se desmoronan bloque a bloque ante la parsimonia a la que la someten los flashes que dan fe de sus atuendos siempre fabulosos.

Y así transcurre la refundación, dejando tras de sí un inconfundible tufito a parafernalia ideológica que dista mucho de sus expectativas iniciales, esparciendo por doquier la sensación de que estábamos mejor cuando estábamos peor.