CANALES PIDE RIGIO
Los colorados abrieron otro frente con la autopostulación de Rafa Canales como nuevo precandidato presidencial en contienda, que se suma así a la lista que encabezan Maribel Espinoza y Marlon Lara, que se habían quedado solitos tras haber echado el culo al charral Darío Banegas, al que apenas le duró poco más de una semana el sueño de aspirar a la guayaba.
“Me permito notificarle formalmente nuestra intención de participar en el proceso eleccionario interno de nuestra institución política” les dijo el expresidente del Colegio de Abogados a los del Consejo Central Ejecutivo mediante una carta donde les expresa su “liberalísimo saludo” y que data del 3 de junio.
A su movimiento lo llamará “Renovación liberal”, avisando en el camino que será hasta el día 17 que lo hará oficial y cruzará los dedos para que algún cristiano le pare bola y no acabe silbando en la loma, como ocurrió con correligionario el caricaturista.
Su anuncio agarra a contrapié a más de uno en el seno del liberalismo, que ve cómo de repente empiezan a aflorar las precandidaturas que antes tanto se resistían, aunque sin dar ninguna de ellas garantías de arrastrar el electorado que el partido necesita para no acabar nuevamente en la cuneta.
Una necesidad que, según algunos colorados, solo sería saciada con una precandidatura de relumbrón, como las de Nasralla o Cálix, quienes ya han sonado en las quinielas, pero que aún deberán esperar el definitivo visto bueno de los que manejan los estatutos para levantar la mano y hacerles el reto.
Un reto que, en caso de que finalmente se les dé, deberán saber sortear, pues no son pocos los liberales que se resisten a su hipotética inclusión, tal y como ocurrió con el propio Banegas, aunque de poco le sirvió. Y sobre eso habré que consultar a Canales el día del anuncio oficial, pues de momento el hombre ha optado por no mojarse.