CALIX: POBRE LUIS NO PUEDE NI CON SU BARRIGA
Jorge Cálix, precandidato presidencial del Partido Liberal, decidió dejar la diplomacia a un lado y lanzarse a la sátira más feroz contra Luis Redondo, el presidente del Congreso Nacional.
Con tono paternalista, afirmó que le da “pesar” al pobre Luis, quien, según Cálix, está más preocupado por sus inseguridades que por dirigir el Congreso. “Pobrecito, tiene que cargar con el peso de la inseguridad de ostentar un cargo de manera ilegal”. Y no olvidemos otras inseguridades, como su obesidad. Es difícil controlar el Congreso cuando no se puede ni controlar ni su propio peso la báscula se le queda corta con el peso de su barriga, comentó con una pizca de ironía.
Sobre las acusaciones de extorsión, Cálix fue categórico: “Yo no estoy extorsionando a nadie”. Extorsión es ‘me das dinero o hago esto’. Yo solo propuse un acuerdo, porque en el Congreso, los votos se consiguen con acuerdos. Sí, hasta los grisáceos y borrosos, que a veces son el mejor tono para evitar que todo se venga abajo.
Pero Cálix no se quedó ahí. Convirtió su crítica en una cruzada moral al arremeter contra lo que llamaba “el familión” y sus “lamebotas”. Según él, el gobierno está desesperado por eliminar la extradición para proteger a sus amigos narcos. “Eliminan la extradición, y nos atacan a los que queremos que los narcos se puedan en la cárcel. ¿Por qué será? Quizás es que el ‘tetero’ de la campaña viene con un sabor especial de algún dinero no tan santo.”
También señaló que Xiomara Castro pasará a la historia no por sus discursos en la ONU, sino por ser “la que impidió que los narcos enfrenten la justicia estadounidense”. Y si hablamos de Redondo, Cálix fue implacable: “No es posible que alguien que no se tomó la pastilla del azúcar quiera decidir sobre temas tributarios. La ley es clara, no se puede someter eso a consulta. Quizás Robombo estaba demasiado ocupado debatiendo entre el pastel de chocolate o la dieta.