AMOR NO CORRESPONDIDO
Debe feo estar enamorado y llenar tus redes sociales con fotos de tu amada, y de pronto darte cuenta de que ese amor es unidireccional, pues en su perfil brilla por su ausencia todo rastro tuyo. Algo así debió sentir Héctor Zelaya, tras visitar a Bukele en San Salvador.
Voló el primogénito de la parejita presidencial a postear sus fotos posando con el presidente salvadoreño, quien lo recibió en su despacho quizás por mera cortesía, porque lo hablado en la reunión que tuvieron (si es que hablaron de algo), no motivó a este último a postear nada pese a ser un asiduo de las redes.
“Encuentro con el presidente Nayib Armando Bukele Ortez. Integración, diálogo y cooperación.”, puso Héctor, emocionadísimo, sin dar más detalles del asunto, respondido sin embargo con un sepulcral silencio por parte de su anfitrión.
Y así fue como el heredero del clan Zelaya se dejó en el hermano país un poquito de su dignidad; demostrando además que pese a predicar con un ejemplo de gobierno diametralmente opuesto al guanaco, tampoco tiene reparos en ir hasta allá a coquetear y sacar pechito.
Es la segunda ocasión que Héctor cae de visita por allá, aunque sí es la primera que lo hace solito; pues el año pasado también fue con su papi a entregarle al presidente más “cool” del mundo una “invitación de la presidenta Xiomara Castro para visitar Honduras”, sin que, hasta ahora, año y pico después, la invitación haya fructificado.