AGÁRRENSE, QUE COMENZÓ EL CIRCO

Habrá que ir mentalizándose para el colosal bochorno que se avecina ahora que el CNE dio luz verde al periodo de propaganda electoral, porque hay algunos que no le arrugan la cara a nada con tal de rascar algunos votillos y ver si con eso les ajusta para lograr su propósito de asegurarse una chambita los próximos cuatro años.

Que se lo pregunten si no a Rashid Mejía, el cipote ese de “Una Sola Voz”, al que Nasralla lleva en una de sus planillas, quien ya empezó a disfrazarse de ciudadano común para mimetizarse con el ambiente y ver si por ahí consigue ganarse el favor de los votantes en Francisco Morazán, departamento del que quiere salir como diputado.

A esa es la conclusión que llega cualquiera que tenga dos dedos de sentido común, pues honestamente dio un poquito de pena ver al muchacho montando a caballo, y aterrizándose un elote cocido durante una de las recientes visitas del precandidato presidencial colorado en el susodicho departamento.

Imágenes compiladas en video y publicadas por el propio Rashid en sus redes, que es donde ha forjado su perfil político, o como sea que se llame lo que hace, que no es más que azuzar a las masas para mantenerse vigente en la palestra pública, y casi siempre con posteos anti refundacionales que, por otra parte, se lo ponen en bandejita de plata cada vez que meten las de andar.