COLECTIVOS, A GUACHIMANEAR HOSPITAL ESCUELA
Es oficial: las altas poporoilas de la refundación piensan con las patas. Resulta que se les ocurrió conceder plena potestad a sus recalcitrantes colectivos para que sean estos los que se hagan cargo de brindar seguridad al Hospital Escuela en la “capirucha”.
Sí, sí, no es broma. Los dichosos colectivos, que representan lo más putrefacto de la escena refundacional, estarán a cargo de velar por que la paz y la tranquilidad del más grande centro hospitalario del país perdure en el tiempo, en un giro de guion que no se lo creerían ni en Hollywood.
La genial medida comenzó a ser efectiva desde el 1 de junio, pero antes tuvieron las mentes maestras de la administración del hospital que cortar todo vínculo con la empresa que hasta ahora se venía haciendo cargo del tamal, tras no renovarles el contrato alegando “clavos” presupuestarios.
Todo ello “por órdenes superiores”, según reza la carta girada al director, que además tendrá que parar toda negociación con cualquiera que sea la empresa que hubiere tenido en mente para darle continuidad a la seguridad del centro.
En definitiva, acá no se gana, pero se goza, y solo se aburre el que quiere. Pues entre tanto bochorno ya la que queda es mejor pensar en ovejitas saltarinas para caer en un sueño profundo que ojalá se terminara cuando acabe la pesadilla de quienes dirigen las riendas del país.