LE LLEGÓ LA HORA A REDONDO

A todo chancho le llega su Navidad; y si no, que se lo pregunten a Luis Redondo, que, tras una larga espera, por fin le tocará dar la cara ante la justicia gringa, donde su “ex”, Alejandra Bustillo, lo topó por haberse hecho el papo con el pago de la manutención de la chiquilla que tienen en común.

Ya días había anunciado Alejandra que el día 21 del mes en curso debía el flamante presidente del Legislativo responder ante los jueces por su irresponsabilidad, al no saldar en debida forma sus compromisos como padre de la niña, a quien mandó exiliar junto a ella en el norte, para evitarse líos de faldas en suelo catracho.

Líos que de todos modos le reventaron, y en forma casi de telenovela, documentada y relatado capítulo por capítulo por la propia cipota, que por andar revelándole el sinfín de sinvergüenzadas al conserje de LIBRE hasta acabó recibiendo amenazas de todo tipo, dizque ordenadas por él mismo, según denunció.

Pero bueno, que todo el parapeto se dilucidará en la Corte de Virginia, donde según los expertos, el señor del bombo la tiene yuca, porque en esos temas los gringos no suelen andar con babosadas. Aunque a ver cómo le hace el hombre para llegar al lugar, pues aún es un misterio lo de su visa, revocada ya días por su inclusión en la Engel.

Aunque algo se inventará su equipo legal, que no debe estar compuesto por cualquier par de pelagatos, pues estar mamando de la teta del Estado le ha permitido al irresponsable papi disponer de recursos ilimitados, según lo dicho también por Alejandra, que desde el día uno no le ha dado tregua, y con razón.

Así que todo está a punto para la conclusión de un bochornoso capítulo que en cualquier país civilizado supondría la renuncia fulminante por parte del señalado, quien, sin embargo, al no conocer la vergüenza propia ni la ajena, ha seguido haciéndose el de a peso, tal y como hiciera con el pago de la manutención que lo tiene ahora sacando la lengua y cruzando los dedos.