CÁLIX VUELA CANDELA
Anda recio Jorgito Cálix en busca de la nominación refundacional que lo catapulte como candidato único a la guayaba, aunque en el camino se esté llevando de encuentro a la propia refundación, atizándola duro y parejo por los dos años y pico que se ha volado casaqueando a sus borregos.
En las tapas les dijo que están saliendo a deber con tanta promesa incumplida y tanta movida chueca ejecutada al más puro estilo de los cachurecos a los que con especial devoción les volaron candela durante doce años desde la llanura.
Pero la tiradera de Cálix llega con tintes de estrategia, consciente quizás de que en los pasillos de la refundación suena cada vez con más intensidad la pataleta que le ha agarrado a la militancia con la impostada Rixi, a la que siguen sin tragar.
Una pataleta que al parecer se canaliza en forma de tembleque en Presidencial, donde los pobres números que les reporta su ungida no les ajustan para dormir a pierna suelta como quisieran, haciendo que algunos anden más arrepentidos que un tatuado con el nombre de la ex.
Y así se las anda gastando Jorgito, que tiene el panorama bien leído, pues ha optado por atizar el fuego fratricida sabiendo que poco o nada puede perder, y haciendo relinchar a los refundidores más tosudos para rascarle adeptos a la rixineta, que no carbura.