ROMANCE A LA VISTA
A ver cuánto les dura la luna de miel. Parece que los poderosos maquiladores andan de cachetes embarrados con el hijo grande de la presidenta. Se han estado tirando flores y hasta convirtieron las redes sociales en un escenario lleno de romanticismo y declaraciones.
El idilio empezó con una publicación de Héctor Manuel Zelaya en su cuenta en X, cuando hizo un anuncio muy importante: “la buena noticia es que Honduras es un gran ganador del impulso del “Nearshoring” de la industria textil en EEUU durante el 2023”.
En el Top 10. El niño ceteco lo que anunció como un gran avance para Honduras y el sector textil: “el análisis de datos anuales de la Oficina de Textiles y Prendas de Vestir de EEUU sugiere que el “Nearshoring” está empezando a materializarse, y Honduras fue el país que más crecimiento experimentó en volumen de envíos en 2023, siendo el único proveedor de prendas de vestir en el TOP 10 que vio un aumento en el valor de los envíos”.
A lo que la respuesta de los maquiladores no se hizo esperar. “Nuestra industria textil maquiladora, su gente y gobierno avanzamos para recuperar empleos y atraer más inversión”, dijo la mismísima Asociación Hondureña de Maquiladores, más románticos, ni Romeo y Julieta. Ojalá que el romance les dure por el tiempo que le falta al gobierno de la refundación, ya que otro sector de la empresa privada les ha acusado de ahuyentar la inversión y la generación de empleo en el país.
A modo de ilustrar, el nearshoring es una estrategia empresarial que implica trasladar la producción y la fabricación de productos a ubicaciones geográficamente cercanas al mercado de destino. En el contexto del sector textil, esto significa que las empresas están considerando mudar sus operaciones de fabricación más cerca de sus mercados objetivo, en lugar de depender de la producción en ubicaciones lejanas, como Asia.
Entre las ventajas del Nearshoring en el Sector Textil, están la reducción de Costes de Transporte, mayor flexibilidad y tiempos de entrega más cortos, mejor comunicación y control de calidad, sostenibilidad y el impulso a la economía local. Ojalá aquella guapa que llaman expropiación, no se entrometa en su relación.
