¡ARREPENTIDOS Y JODIDOS!

8 de cada 10 prefiere tirarse por un barranco antes que volver a votar por la refundación. En el abecé del ‘coaching’ motivacional se dice clarito que nunca es bueno andar tomando decisiones a la carrera, o motivadas por un capricho o resentimiento, pues el sopapo que se puede obtener a cambio puede ser mayúsculo.

Y en esas andan los que en 2021 se echaron a las urnas con una venda en los ojos, con la única idea entre ceja y ceja de extirpar el tumor que los aquejaba esos días, sin imaginar que al final acabaría siendo peor el remedio que la enfermedad.

Y así lo hizo notar una reconocida empresa nacional-regional, que tras haber sondeado el terreno supo que, hoy por hoy, ocho de cada diez de aquellos resentidos votantes están más arrepentidos que Judas después de haber traicionado al colocho.

Juran ahora los arrepentidos que jamás de los jamases volverán a pecar de ingenuos, pues ahora que le conocieron los colmillos a la refundación en la que confiaron, andan con ganas de tirarse por un barranco.

Con semejante panorama, los entendidos consideran que la refundación la tiene yuca para imponerse de nuevo en 2025, pues sin el empuje de los arrepentidos acabará reventándose la jeta contra el paredón.

Salvo que se saquen de la chistera un fraudecito, de esos que tanto les gusta criticar; y tal parece que por ahí se la quieren llevar. No por gusto andan queriendo insertar en el CNE al cavernario pupilo de la Rixi, para que con su plenipotenciaria actitud de quemallantas prenda fuego a los herejes en caso de necesidad extrema.

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