¡POR COQUETO, SE LO TOPARON!

Por andar de coqueto con la refundación, la DC le voló el tallo a su único diputado, un tal Carlos Raudales, que a partir de ahora alzará la mano con la bandera del independentismo en el Congreso, aunque la seguirá deslizando bajo la mesa cada vez que agarre “moje” de sus padrinos de Libre.

Se queda entonces la DC, también conocida como Democracia Cristiana, sin un solo pelón en el hemiciclo, pues su Comité de Ética y Disciplina prefirió mochar a su único abanderado antes de seguir, a través de él, juntándose con la chusma.

Pero de volada, tras haber sido echado como un leproso, a Raudales se le abrieron oficialmente las puertas de la refundación, a quienes desde hace días se le había puesto en cuatro, pues de la mano de Rasel lo invitaron a salir del armario para unirse a su lado oscuro.

Aunque poco importará a Carlitos su expulsión, ya que sigue teniendo fija la chamba de vicepresidente del Congreso de Redondo, al que hace unas pocas semanas se plegó sin miramientos a cambio de legalizarlo tras dos años de usurpación del puesto.

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