TSC SE SOSTIENE CON UNA PATA

Donde se ha visto que una mesa de tres patas se sostendrá solo con una, pues eso le está pasando al Tribunal Superior de Cuentas (TSC), de tres magistrados solo queda uno y con un plazo vencido.

Pero como en el Congreso Nacional parece tener el calendario más desorganizado que una fiesta de adolescentes, no caben los temas prioritarios como la elección de los magistrados del TSC.

Ahora el magistrado Juan José Pineda, tras la renuncia de Ricardo Salgado, tendrá que sostener el Tribunal Superior de como un malabarista con diez platos en el aire.

Es por eso que el valiente caballero de la fiscalización, se levantó en medio del caos para pedirle al Congreso que deje de hacer el ridículo y nombre de una vez por todas a los magistrados que faltan.

Pero quien sabe si los honorables diputados le hagan caso porque al parecer no saben que es más urgente que la pizza este en la puerta para ver en primera fila el juicio de JOH o fortalecer el Tribunal Superior de Cuentas.

Pineda nos asegura que, aunque el Tribunal sigue operando, la situación es más tensa que una cuerda de violín en un concierto de rock. Pero nos tranquiliza diciendo que pueden ver sus actividades en línea, porque las actividades cotidianas siguen caminando.

Pero por otra parte reconoce que el pobre Tribunal está tan atascado como un carrito en el tráfico del centro en hora punta. Con un año de retraso en sus decisiones importantes, es como si estuvieran jugando al escondite con la justicia.

Y hablando de juegos, Ricardo Rodríguez ha decidido retirarse del tablero, pero no porque ya no quería jugar más sino porque claro su familia está primero.

Pero nuestro héroe, Pineda, se queda firme en su puesto como el último bastión de la cordura. Él nos asegura que no se irá hasta que el Congreso finalmente decida tomar en serio su trabajo y nombre a los próximos magistrados. ¿Cuánto tiempo pasará? Bueno, eso es incierto, porque el Congreso sigue jugando a las escondidas.

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