¡BOMBAZO LEGAL!

 

En un acto que ha dejado a muchos con la boca abierta, porque al parecer inician los resultados de los cambios en la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), el intrépido abogado Arturo Chinchilla Castro ha decidido plantar cara a la injusticia presentando un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley de Privación de Dominio.

¿Su objetivo? Al parecer defender a algunos diputados desvalidos involucrados en el caso Pandora.

¡Pero cuidado! Aunque se presenta como el fiel apoderado legal del Partido Liberal, las malas lenguas no pueden evitar sospechar que hay algo más detrás de esta movida legal. ¿Quién se beneficiará realmente de esta cruzada? Nombres como José Celin Discua Elvir, Rodolfo Irías Navas y compañía han saltado a la palestra.

Recordemos que estos caballeros fueron previamente acusados en el infame caso Pandora I, ¡pero seamos justos! ¡Algunos fueron sobreseídos! Claro, ahora solo están esperando que les devuelvan sus juguetitos (bienes), demostrando su inocencia y cómo, por supuesto, adquirieron tales tesoros.

Lo sospechoso es que esto se da justo cuando la presidenta de la Corte Suprema de Justicia, Rebeca Ráquel Obando, ha nombrado al afiliado del Partido Liberal, el magistrado Walner Vallecillo, como coordinador en la Sala de lo Constitucional ¿Casualidad? Juzgue usted.

Claro, algunos expertos legales han alzado sus cejas con suspicacia. Porque, según ellos, la Ley de Privación de Dominio es como el superpoder de los superhéroes: ¡sirve para demostrar la bondad de los bienes y combatir el malvado lavado de dinero, el narcotráfico y la corrupción!

La pregunta ahora es ¿Se abrirán las puertas del Olimpo legal para este recurso o será condenado al purgatorio del olvido?

Mientras tanto, agárrense los cinturones, que este remezón en la gran Corte se pone cada vez más emocionante.

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