SE BAJAN EL CANASTO
Se volvió a revolver el gallinero refundacional, con acusaciones de “extorsionadora” para la zarca Scherly Arriaga, atizada en las redes sociales por otra de igual calaña, una tal Tesla Maradiaga, muy popular entre la borregada más recalcitrante del gobierno.
Señala Tesla a Scherly su hipocresía, ya que valiéndose de su puesto como mera mera de la comisión de equidad de género del Congreso anda por ahí, agrediendo y pidiendo coimas a las damas a quienes consigue chamba en las instituciones públicas en las que extiende sus tentáculos.
Avisa también Tesla, a la que algunos incluso relacionan carnalmente con el hijo mayor de la parejita presidencial, que la zarca diputada no es una tipa de fiar, pues como que también gusta ella de difamar y excluir a sus enchambadas.
Todo ello mientras, por otro lado, en la Secretaría de Derechos Humanos se siguen pasando por la entrepierna los derechos de sus enchambados, y mientras Xiomara Castro sigue callando como una muda, incapaz también de poner orden en el corral.